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El cuidado de las manos, muchas veces pasa a un segundo plano después del facial, y sin embargo, el aspecto de las manos es tan revelador de la edad, como el de la cara.

Características especiales de las manos

La piel de las manos, es particularmente delgada ya que no tiene apenas tejido graso. Posee muy pocas glándulas sudoríparas en el dorso, así como muy pocas glándulas sebáceas, que son las encargadas de lubricar la piel.
Para colmo, son las partes del cuerpo mas expuesta a agresión: detergentes, fricción, radiación solar, frio, contacto prolongado con el agua, etc. Todo esto hace que su manto hidrolipídico se altere muy fácilmente debilitando su función de barrera.

Como prevenir el envejecimiento de las manos.

El lavado de las manos, que en ocasiones es exageradamente frecuente, debe hacerse incluso en invierno con agua tibia y no muy caliente aunque la elevada temperatura pueda resultar apetecible. El exceso de calor en el agua, agrede directamente el manto hidrolipídico y contribuye a la sequedad de la piel.
Crema de manos frecuentemente. Un buen cuidado de las manos debe incluir tras el lavado y buen secado la utilización de una crema rica   en urea, pantenol, aceites vegetales y ceras, que funcionan como aislantes de agresores externos. La aplicación de crema, puede realizarse tantas veces como se quiera acompañándola de un suave pero profundo masaje, que además tiene como función estimular la circulación periférica de la piel.

 

Las manchas. Son el signo mas temido y diferenciador del envejecimiento de las manos.
Es verdad, que el envejecimiento de por sí, es un factor importante en la aparición de estas lesiones, pero la exposición sin protección al sol, es un factor importante y decisivo en la aparición de las manchas. Es importante el uso rutinario de fotoprotectores antes de salir a la calle, y no olvidarse de renovarlo cada dos horas o mas si ha habido lavado de manos en ese lapso de tiempo.
Igualmente, el uso de cremas despigmentantes puede resultar adecuado cuando este problema empieza a hacer su aparición
Asperezas. La fricción provocada por muchas tareas habituales provoca la aparición de zonas ásperas e incluso callosidades como mecanismo de defensa. Además de la hidratación habitual, es conveniente en estos casos realizar una o dos veces por semana una exfoliación suave con cremas especiales para ello.

Tratamientos estéticos

Cuando el problema se acentúa bien sea a pesar de los cuidados preventivos (porque la edad no perdona), o bien porque hemos llegado tarde, la medicina estética ofrece tratamiento para prácticamente todos los Inesteticismos de las manos, como es el tratamiento despigmentante que se realiza combinando diferentes técnicas químicas y físicas. La reposición del ácido hialurónico, el relleno del dorso de las manos para eliminar la apariencia de manos “huesudas”, etc.

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