El envejecimiento cutáneo es el proceso natural y cronológico mediante cuál la piel comienza a volverse más seca, más arrugada y tiende a sanarse más lentamente.
Este proceso, producido por el paso de los años y por la exposición al sol, constituye uno de los motivos de consulta más frecuentes en el ámbito de la medicina estética.
La mayoría de los cambios que se producen son naturales, inevitables e inofensivos, teniendo solo una repercusión estética sobre el individuo, mientras que otros pueden producir prurito, dolor e incluso pueden constituir lesiones malignas pre cancerosas requiriendo atención médica adecuada.
Sean peligrosos para la salud o simplemente cosméticamente indeseables, la mayoría de los problemas asociados con el envejecimiento de la piel pueden ser resueltos con terapias eficaces.
Las arrugas
A medida que envejecemos, la piel pierde elasticidad. El colágeno y la elastina, las sustancias que mantienen la flexibilidad de la piel, se debilitan, se producen en menor cantidad y son de peor calidad. La dermis en la piel se adelgaza, se pierde la grasa subcutánea, y la capa externa de la piel por el contrario se engruesa, dando una apariencia menos turgente y menos suave.
Aunque existen factores genéticos determinantes, el cuan arrugada esté la piel dependerá en un amplio porcentaje del tiempo de exposición que esta haya tenido al sol a lo largo de su vida, ya que este es la principal causa de los cambios en la piel envejecida, lo que denominamos fotoenvejecimiento.
El tabaquismo, la mala alimentación y la predisposición genética hereditaria también pueden contribuir a su desarrollo.
Tratamientos para el envejecimiento de la piel
La batería de tratamientos, tanto en el crono como en el fotoenvejecimiento, es muy amplia y puede utilizarse en forma combinada para adaptarlos a la necesidad de cada paciente.
Desde sofisticada aparatología, como tratamientos simples, continuados de aplicación domiciliaria.
El ácido retinoico, una sustancia que ha sido usada exitosamente en tratamientos de acné, ha demostrado la mejoría que produce en la textura de la superficie de la piel, reduciendo la irregular pigmentación e incrementando el colágeno dérmico. Esta sustancia es la base de muchas cremas de uso domiciliario.
Los alfa hidroxiácidos, entre los cuales el más conocido es el ácido glicólico, también son capaces de revertir algunos de los daños producidos por el sol. Estas sustancias deben aplicarse en tratamientos de consulta médica, constituyendo la base de los denominados “peelings químicos”, y deben seguirse en domicilio mediante un protocolo adecuado.
Una toxina naturalmente producida por una bacteria, el Clostridium botulinum, es un potente neuromodulador que puede también ser usada para relajar los pequeños músculos y así eliminar líneas de expresión fijas como las marcas del entrecejo. Este tratamiento se ha convertido en uno de los más utilizados en el mundo entero como solución para las arrugas de expresión.
Algunas pieles arrugadas que no respondan adecuadamente al peeling, o que estos se queden demasiado cortos, pueden ser mejoradas con láser u otro tipo de dermo abrasiones.
Piel seca
A medida que envejecemos, nuestra piel se vuelve más seca. Puede resultar escamosa, pruriginosa, especialmente al ser expuesta a climas fríos, secos y ventosos.
El problema de esta patología, es básicamente el prurito, que hace que el paciente se rasque continuamente y a veces de una forma agresiva para la piel, lo cual trae como consecuencias verdaderas lesiones cutáneas por arañazo e incluso infección de algunas de estas lesiones.
La piel debe mantenerse adecuadamente humectada sobre todo después del baño con agua caliente, ya que este remueve la capa lipídica protectora de la piel.
Un ingrediente usado en muchas lociones, cremas y ungüentos es la vaselina, un excelente humectante, muchos humectantes contienen productos químicos tales como: urea, alfa hidroxiácidos, ácido láctico, lactato de amonio, utilizados para reducir la descamación y ayuda a la piel a retener el agua. Sin embargo, algunos de estos productos químicos pueden irritar la piel, por lo que deben usarse siempre vigilando el efecto que producen en cada paciente en particular.
Lesiones de la piel
La piel envejece y las lesiones se vuelven más comunes. Ellas pueden clasificarse, desde las más inofensivas verrugas seborreicas, o manchas de la edad, hasta cáncer de piel que requieren un inmediato tratamiento. La mayoría son causadas por años de exposición solar.
Entre las más comunes hay unas manchas rojas escamosas llamadas queratosis actínicas. Si son ignoradas, pueden convertirse en cáncer de piel, ya que eventualmente necesitan ser removidas quirúrgicamente. En estadíos tempranos, pueden ser eliminadas por aplicación de una crema quimioterapéutica, o eliminándolas con diversas técnicas de abrasión como el Nitrógeno o el electrocauterio
Cáncer de la piel
Básicamente, y exceptuando el melanoma, existen dos tipos de cáncer de la piel, el basocelular y el espinocelular.
Es muy frecuente encontrarlos sobre el borde de la oreja, la cara, los labios o el dorso de las manos.
El carcinoma basocelular es la forma más común de cáncer de piel. Usualmente, aparece como una lesión pequeña, brillante en la cabeza, cuello o pecho.
Es más común en personas mayores de piel blanca, pelo rubio o colorado y ojos azules o verdes.
Sin tratamiento, estos cánceres de piel pueden sangrar y crecer lentamente y raramente se esparcen a otras partes del cuerpo. Cuando son tempranamente tratados, tanto el carcinoma espinocelular o el basocelular tienen un 95 % de curación.
Otras lesiones de la piel
- Queratosis seborreicas: manchas elevadas, marrones o negras, parecen como si hubieran sido pegadas sobre la superficie de la piel. Ellas no son cancerosas y son muy comunes en la gente mayor. Pueden ser removidas fácilmente.
- Nevus rubí: son inofensivas, pequeñas cúpulas rojas, brillantes, formadas por la dilatación de los vasos sanguíneos. Ello ocurre en más del 85 % en personas de mediana edad y mayores, usualmente sobre el tronco. La electrocoagulación o láser terapia remueven estas manchas.
- Telangiectasias: Son una dilatación de los vasos sanguíneos, son frecuentes en la cara. Habitualmente están relacionadas con daño solar. Responden al mismo tratamiento que los nevus rubí, y pueden también tratarse mediante esclerosis química.
En nuestra clínica en Sevilla, siempre recomendamos un seguimiento personalizado que debe ir cambiando y adecuándose a las necesidades de cada paciente en cada momento para el tratamiento de sus signos de envejecimiento
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